Las tecnologías de la información y la comunicación han ido incursionando en los diferentes ámbitos de la cultura, el contexto escolar no es la excepción. Sin embargo, como en todo nuevo proceso se debe dar una etapa de apropiación personal donde se hace un reconocimiento de los objetos, cuáles son, sus funcionalidades, su utilidad dentro de las labores cotidianas; para posteriormente llegar a la apropiación profesional, período en el que se piensa en dichos artefactos como elementos que apoyarán mis estrategias metodológicas de enseñanza. Es indispensable para esta etapa acompañar el uso de estos recursos con objetivos claros de aprendizaje para no llegar a caer en un uso mecánico.
